lunes, 2 de septiembre de 2013

Que estúpida lucha, la de quedarse con la última palabra.
¿Acaso no ves, las palabras que quedaron adentro? Vos te fuiste y aun mi silencio sigue hablandote demasiado.

domingo, 11 de agosto de 2013

Olvidos.

Qué pretensión la nuestra, de creernos inolvidables,
perpetuos en el recuerdo del otro, en el suave pensamiento
del otro.
Qué miedo nos da que nos olviden, que nos saquen con
pincitas de a poquito. Llamamos en vano la voz del
ausente por la noche porque pareciera así que nadie nos oye.
Una vez más.
Qué pretensión la nuestra de caminar,
por el mismo desierto de imágenes, se repiten una y otra vez;
un pájaro vuela de una boca y muere contra la mano.
Y una voz le dice al silencio, reposo de dichas;
no va a volver, ya se olvidó.

lunes, 5 de agosto de 2013

(Des)encuentros.

Dijiste que había muchas formas de dejar un lugar. Una ausencia no es un día no estar más. Si miras bien, ya no estoy sentada en el mismo banco, esperando tu abrazo. No quiere decir que partí, partir no es solo dejar un sitio. Quizás simplemente me corrí de lugar, y tu miserable punto de vista, no puede darse cuenta que tan solo estoy en otro banco, del otro lado. Esperando que el abrazo nunca se desprenda de aquel otro abrazo que jamás llegara a la cita.
 
B.C

Herboristeria

Arrancarte del minúsculo músculo,
sin que deje de vivir.
Arrancarte pero escrupulosamente,
como se arranca la hiedra mala,
desde la raíz para que no vuelva a crecer.
Arrancarte del corazón.
Arrancarte cuidadosamente sabiendo siempre,
que la tierra removida,
trae nuevas semillas.

B.C

Las lágrimas tampoco lloran.

Contar hasta tres, no salen. Hoy no saldrán.
Se ve que le temen a la humedad, hoy hace frío y el soplo efímero de una brisa las podría congelar.
Contar de nuevo, nada. Esperan dentro, amotinadas, revolcadas en el duro cristal. Se chocan unas contra otras, las puedo oír, puedo oír el suave murmullo de su penitencia organizada. Temo por el olvido, la peor de las epidemias.
Contar, contar, silencio. Ninguna se asoma.
Intuyo que le temen a la caída, altruista acto de entregarse al vacío.
Contar, ya en vano. No saldrán. Pero con que fuerza las siento, náufrago mar dentro mío. Contar, y no. Estarán de huelga, la huelga de la esperanza,
la genuina idea de no caer,
ya no caer más.

B.C

lunes, 6 de mayo de 2013

Los sueños


- : Soñé con praderas que nunca terminaban. Un cielo comido por tijeras que usaban polleritas de ballet.
Un árbol me cantaba algo que no podía oír, y la luna me mojaba los pies. Mi cuerpo se hinchaba hasta tomar una forma que antes no había visto, olía a geranio o algo parecido. Las lágrimas no tardaron en rebasar de mis ojos que ahora eran dos frutos secos floreciendo.
Desperté con la sensación de morir. Los pechos como pasas de uvas evocaron que había existido algún lugar así, en algún momento. Mis labios se secaban hasta reducirse a una línea corrugada.
Desperté. Ningún horizonte me esperaba, ninguna sensación de rebasar, ni un solo cuerpo.
Soñé. Y soñé que despertaba,
que es muy diferente a despertar.

B.C

Decir y no

Me muerdo la lengua
para que la palabra no salga.
Como un parto prematuro,
solo que nacio hace tiempo.
En verdad, ya estamos
en su funeral.
Y la palabra fallecida,
intenta nacer.
Me muerdo la lengua,
para que la palabra no salga,
pero no puedo
morder el pensamiento,
esa larga procesion,
noches largas
entre lo efimero
y lo eterno.

B.C

Puntos


Uno termina quedándose en el punto menos esperado.
Un punto monocromático sobre un fondo multicolor o en un sinfondo, no pretende ni resaltar, ni esconderse. Pretende solo estar allí,habitarse.Ese punto sucede, mientras que todos los demás son solo transeúntes sobre superficie.
Con las personas sucede lo mismo, basta con buscar entre ese lienzo latente el punto que jamás se notará. Entonces uno termina por quedarse en ese punto mas esperado.
Una persona puede pasar por nuestra vida o quedarse a habitarla.


B.C

domingo, 27 de enero de 2013

No sé decir


Esas palabras, ese calor perseverante que arde.
La llamarada de esos brazos, los ligeros latidos de un tambor.
La piel sellada en otra piel.
La tibieza descalza entre vientres que chocan.
Una lengua viboriza buscando su destino. Esas suaves plegarias incumplidas,
sueños dormidos.
Una historia que se teje sin aguja. Pareciera que anda sola, robando intemperies por ahí.
Tampoco noches, noches retobadas, camas embriagadas, ensoñación  Ni un suspiro, ni gritos callados de esos que duelen de tanta dicha adentro.
No sé decir con estas palabras, entonada con lo que se quiere decir.
No sé decir con estas palabras,
te amo,
y ya. 













lunes, 14 de enero de 2013

Despalabra

Me siento monte,
 una llanura atraviesa
 mis dichas espinadas.
 Me siento desierto,
 ningún agua da de beber a mis penares.
 Me siento lluvia,
la luna moja un par de recuerdos
 y los lava.
 Pasada de noches,
 me siento abismo,
penumbras de reojo,
 voces mutiladas.
Me siento desterrada
de mis palabras,
 y eso da mas miedo
 que el exilio en el silencio.