viernes, 30 de enero de 2009

Celebración VI




Esta carne que late, estos huesos que gritan.
Mi vientre que no es mío, mi espíritu viviente que destroza tantos sensibles.
El cuerpo, el látigo, la cumbre.
Mi cabeza que gira, mis piernas que vuelan, mis dedos que expresan.
La conciencia, el placer, la duda.
El llanto que despliega, la vida que nace, todo el amor que invade.
La espera, fluir, abrirse.
Enseñar,
luz,
fin,
parir.

La felipe


Las histéricas somos lo máximo!
Extraviadas, voyeristas, seductoras, compulsivas
finas divas arrojadas al diván de Freud y de Lacan.
Ay! Segismundo, cuánta vanidad!
infantiloide y malsano el orgasmo clitoriano?
Ay! Segismundo, cuánta vaginalidad,
el orgasmo clitoriano se te escapa de la mano.
Ay! Segismundo de tan macho ya no encaja
no me digas que el placer es pura paja.
Por lo demás correspondo a tus teorías
estoy llena de manías, sueños, fobias y obsesiones,
sólo tu envidia del pene y el diván de tus eunucos
administra mis pulsiones compulsivas.
Cómo me duele este mundo, Segismundo
la parálisis, la envidia, la neurosis nos gobierna
como me duelen los pobres, como jode la miseria,
ora si que lo de menos es la histeria.
Ay! Segismundo, ...
Las histéricas somos lo máximo!
Solidarias, fabulosas, planetarias, amorosas
super egos moderados, cunnilinguos para todas a placer...
Ay! Segismundo, cuánta vanidad!
Ay! Segismundo, cuánta vaginalidad,
Ay! Segismundo de tan macho ya no se
si poner punto final, o ponerle punto G.

lunes, 12 de enero de 2009

Insensatas

Yo me pregunto dos por tres, que hay de los días domingos universalmente nostálgicos y de los gatos temerosos a la gente.
Me pregunto también, de la gente temerosa de otra gente, de uno miedoso con uno mismo. Me pregunto por el sol cuando deja el día, y de la noche allá arriba sola y descalza. De los besos sin destino, de las sombras contra la hierba, de la hierba pegada a mis pies.
Me pregunto de cosas que jamás pensare. Me pregunto además de la gente haciendo el amor, y de la gente peleando por algo olvidado. Pregunto por la memoria y por el momento. Me pregunto por la vida y todo sobre sus vagamundos.
No será digo yo, todas estas preguntas una respuesta a ninguna pregunta.

Corto


Vamos letargos al manto de árboles que cubren la noche. Nos preparamos para el festejo, para recibir al nacimiento.
Vamos silenciosos a presenciar la partida y una muerte.
Vamos despacito,
vamos a la vida.

martes, 6 de enero de 2009

Miedos


Simplemente la perdición de retomar siempre un recuerdo que me haga volver a vivir cosas de puro joder, de puro sufrir.
Problemas en la cabeza que deseamos tener.
Culpa engendrada por pena y la infinita deuda que nunca pagaremos.
Soltarnos de un amor y creer que nunca encontraremos un refugio. Creer y pensar.
Sostener una visión por temor a vernos. Ver y decir.
Reírnos de todo y abrazarnos al universo, hacer el amor con la plenitud,
Si en fin de eso se trata el amor y el goce.
Amar a la vida.

sábado, 3 de enero de 2009

El Universo VI


El era un buda de estos tiempos. Sobre las flores recitaba unos versos tranquilos, mientras la naturaleza gigantesca sobre el lo cubría del frío.
Se le veían apenas los ojos y su mente perdida en otros mundos visitaba ágil al sufrimiento y a la percepción del ser.
Sobre su meditación yacía un manto violeta que antes no había estado ahí, pero que sin embargo debía estar allí en ese tiempo, en ese lugar. ÈL se paró, liviano como una pluma, fuerte como un árbol; al costado de la sombra se paro y miro y observo. El manto de un espesor hermoso, comenzó a levitar, y bailando y gimiendo una canción muy lenta le dijo a buda: "ahora soy yo un compañero para tus viajes, tus pies para andar, tu boca para plegar, tus ojos para espiar."
Sin entender demasiado pero sin importar de esto otro poco, buda hizo caso y tomo el manto se cubrió de el y ya no solo y de soledades emprendió su camino.
El manto se le metía en la piel, y de apoco no había dos cuerpos, de pronto creció el día y el sol. Se abundo de árboles y plagas, de animales y de otros cuerpos.
Del cielo unas fuertes manos abrazaron al buda, y comenzó a llover.
Lejano, como si viniera de un infinito una voz hablo y procuro: " Mírenme, de esta lluvia nacen las cosas cotidianas y este mundo que viene de otros mundos que hay en èl, y que ahora son ser y sentires. Ahora podemos decir para contar, porque ahora somos existencia y existimos."
Vida.