jueves, 31 de diciembre de 2009

Corto


Ahi me ves entre amapolas y colores,
entre dias y horas.
Ahi en la llanura reposante,
entre emociones que ululan fuerte,
entre alboroto, y despacito
estoy junto a vos.
Tus mariposas me inundan de tranquilidad
y me transforman perpetuamente.

Un puente para pirarme

Cómo suenan los zumbidos de mi insoportable cabeza que me ata al cuerpo. Cómo me jode cada vez que quiero perderla, basta con cerrar los ojos e irme al centro, a la espera de la paralelidad. Al sueño incitante, a la pesadilla que me azota, a lo que no palpo ni siento por pura frialdad.Mutilado, sosiego, ausencia,pausa.
Pero vuelvo a recordad la cabeza que me ata al alma, y pienso en un músculo que trabaja con placer, y que me ejercita a la memoria, y viajo por esas imagenes, del verano pasado, del café quemado, de la guitarra reposando sobre su figura y entra la brisa por la ventana me cuenta sus cuentos,me encanto con su canto, y de pronto solo soy mi voz y una especie de síndrome desnudo, que ya no piensa en que tan mal es el mundo, ni que tan mal fue recordar, ni que mi cabeza es despereza.Entonces ya no importa si la guitarra grita amor o venganza, ni que los recuerdos son fotografías en cepia, ni mucho menos que estoy solo.Hoy soy ya lo que siempre fui, y no quiero mas que mi descanso y mis andares,hoy soy esa paz y ese música que me azota a este cuerpo, a esta carne, a mi metamorfosis.

jueves, 17 de diciembre de 2009


Ahi van esos dos vagabundos,
escapando de las palabras del poeta.
Corren de la pluma que los nombra,
de la tinta que los encierra.
Corren del verbo que los remite solo
a la mirada de los apasionados.

martes, 10 de noviembre de 2009

Mujer al óleo

Obnubilante curvatura de la luna llana:
despiadada de los infiernos caníbales,
censurada por el ojo vulgar,
pausada en las bocas serpentearías,
aniquilada por el deseo fugaz,
temida por las manos del débil,
atrapada en el sueño de un perturbado,
ahogada por dioses soles.
Despierta por tu calor de vientre,
vibraras por hoy y por mañana
toda esa perfecta obra que encarnas
dibujada en lo mas terrenal.

martes, 14 de julio de 2009

Equilibrio




Detrás de dos gotas que caen por la ventana, hay un mini mundo sosegado por todo este otro mundo real.
AL otro lado de la mente, hay un cuenco que respira mutado dentro de un jazmín que huele a jardín.
En medio de un corazón dibujado, hay un gemido de locos que se nacen de amor locamente.
En mis manos que bailan solitarias, hay otras manos que piden ser llevadas por sus propios pies.
En estas palabras tal vez, se encuentren dentro otras minúsculas palabras que relean todo este decir.

Crónica del festejo

Los dioses sin sexo allá arriba se amaron. Se frotaron sus cuerpos, se dijeron bazofias imponentes, se regalaron ofrendas interminables.
Pasaban días y noches recitando palabritas y palabras bien grandes que iban soltándose por los cielos y los mares. De a poco esas palabras no entraban en el cielo, entonces se fueron divisando hacia otros mundos y otras ventanas.
Una hermosa palabra como plenitud fue a parar a la ventana de Juno, y otra mas revoltosa como locura se plasmo sobre el pecho de Fermín. Sin saber ninguno del otro, estas palabras fusionadas y embarazadas dieron lugar a los amantes. Con ellos a otros planetas, y otros mundos, y a otras tantas ventanas.
Y estas al abrazarse como bien habían donado esos dioses despiadados, sin saber siquiera que transmigraron vida, dieron agua y fuego, viento y tierra a todas las otras palabras de los muchos mundos mundanos.
Y así se armo una revuelta en esta vida,
y así se festejaron los decires en este universo.
Retazos III

Al desaparecer la sombra que te sigue, se esfuma el viento apacible.Al ver tu voz morir en mí lloran los árboles y las sabias. Parece raro este andar sin camino, pero al fin allí esta tu luz.
Descalzo de cuerpo te vas pausadamente y no ves quizás que dejas en tu andar, la calma que respira por si sola.
No ves en mí la palabra que te nombra.

lunes, 6 de julio de 2009

El viajero y la intérprete




Hay un lado de la mente que perdura en el ayer, como hay un árbol que sostiene un pájaro.
Hay un camino sinuoso ausente de ser transitado, y mil jaulas encerradas. Para ser abiertas, para ser libres fisuras.
Una canción olvidada en una partitura, algún perro vagabundo, alguna anciana revivida en el pasado, envejeciendo hacia atrás.
Y hay también un hoy, hay mañana.
Hay otro lado de la mente que transita el momento, como hay otros barriletes surcando un mismo cielo.
Hay ventanas abiertas en sueños ajenos y cuentos recitados sin finales para quien los lea viva ese instante avivado de alguna vigencia.
Hay una voz que se entrega a la aurora y una danza eterna.
Esta el viajero para recorrer el cauce del río y la interprete para sobrevolar esos viajes que no debemos olvidar.

Ausencia

En el brebaje de la mañana
te espero adormecida.
Mientras vuelan algunas sedas por la ventana que sopla abierta,
miro de reojo el reloj que se mueve inusual
por estas horas que pasan solas y se ríen de ser fugaces al tiempo.
En la contemplación del atardecer
te oigo respirar cerca mío.
Y despacio, por lo bajo, como un valscesito desvelado,
me acurruco en un hueco de la cama.
En la noche, que llega desafiante
no me animo a mirarte.
Simplemente me curvo con tu cuerpo,
y como si el tiempo y el cuarto no existieran,
me despliego por tus entrañas,
y reposo rebosada
de estos días
que solos
duelen de ser llevados.

sábado, 30 de mayo de 2009

Crónica del odio.




Estas ahí parada, estas ahí pero no me ves. Del otro lado, al otro extremo te miras sin mirarme, te escuchas sin oírme, te sonríes de cualquier cosa que se pasa por tu cabeza y yo acá te espío.
Te grito, te imploro, te exploro. Ni una señal de que existas, ninguna señal de que estés viva.
Sorda, apagada te vas yendo, desvestida y alborotada te despedís de mi. Entonces estamos en frente una a la otra y nos gritamos, nos comemos, nos derribamos. Poco a poco se pierde el dolor y todo se va desvaneciendo. De pronto no se por que nos miramos pero no nos podemos ver, vos sos yo y yo soy tu silueta que te recorre y se vuelve a separar y a pelear, pero nos damos cuenta al fin que no, que no podemos huir, estamos juntas en esta cosa de mirarnos por nosotros mismos.

sábado, 2 de mayo de 2009

Corto

Va el barco hacia el adiós, y vuelve el mar a los Bienvenidos.
El inicio finaliza y el final comienza...
cosa rara esta paradoja del hilo conductor que desune uniendo.

viernes, 1 de mayo de 2009

Detener la palabra, de Roberto Juarroz

Detener la palabra
un segundo antes del labio,
un segundo antes de la voracidad compartida,
un segundo antes del corazón del otro,
para que haya por lo menos un pájaro
que puede prescindir de todo nido.

El destino es de aire.
Las brújulas señalan uno solo de sus hilos,
pero la ausencia necesita otros
para que las cosas sean
su destino de aire.

La palabra es el único pájaro
que puede ser igual a su ausencia.

Retazos II



Siempre miramos a través de esos espejos rotos.
Mas bien, esquivemos ese modo de vernos, modos de amarnos.
Mejor así, de a poco.
Como si doliera, como si nos escondiéramos de algún gigante.
De a poco,
de a ratos.

martes, 17 de marzo de 2009

Retazos



Ella esta en el ocaso,
en el muelle mirando al mar.
Esta en las paredes escritas,
en los muros que quiebran.
En el ayer y en el mañana,
pero no puede estar en el hoy.
Ella entera y desmenuzada
sucumba en mis ojos.

lunes, 16 de febrero de 2009

Crónica del amor


Como amapolas soñas entre mis pelos que vuelan por las ventanas de la cuidad apagada,
entre cuenta gotas te perdes en mis labios que te tocan con esa tibia humedad de vapor, al final de nuestros pies que descansan eternas siestas se abren abismos y caminos que plasman cánticos incitantes.
Estamos en la sombra de un árbol que relata amares, estamos en nuestro propio solo cuerpo, único cuerpo.
Vamos tenues hacia la luna, hacia un abrazo gigante que nos desnuda de este mundo,
mientras vos te lavas el cuerpo con ganas, yo soy la lluvia que te destiñe.

Cosmos

Surcando los bullidos de incesantes pensares,
viajando impaciente entre esas rutas quebradizas,
allá lejos de la vida, allá lejos la muerte.
En el medio, como si fuéramos dos aguas que separadas
se juntan en el medio del mar.
Ahogo sin respiro,
unas bocas que se enciman por lo bajo,
y se tocan,
se rozan,
y en ese momento el viaje termina,
y yo contra tu pecho te lloro,
te murmuro.
Y es perfecto ese encuentro con uno.
La Extranjera

Liliana Felipe

Hablo con dejo de otros mares
Y ya no sé qué arenas
Guardarán secretas,
Aquel pequeño puñado de historias que fuí
Tan lejos de aquí.
Hoy tu cuerpo es quien me enseña a vivir
Y desde que me abrazas
Desde que me besas
No soy aquella que llega
Y que piensa distancia,
Tu vida también es mi país.
Y si algún día ves que voy a morir
Préstame tu pecho,
Será noche tibia
Y yo tendré por patria
La almohada que me diste.
Puede ser que muera así cantando bajito
O que me meta en un rinconcito
O que sienta como un frío de dos,
Pero no moriré extranjera
De tus labios fuertes.

viernes, 6 de febrero de 2009

Cronica del llanto



Una montaña solitaria se despliega por el llano. Medita por un momento y luego como un ritual abre sus rocas, de a poco van naciendo pájaros que emancipan de sus alas unos cantos que hacen nublar el cielo y los mundos.
La hierba se humedece y la tierra pare con orgullo, pare árboles, pare flores. La tierra esta pariendo vida y duele y hace doler.
Entonces la montaña se cierra de a poco y las rocas gritan con ganas, se chocan entre si. De pronto el cielo se separa de este mundo,
entonces llueve.

Cosmos

Surcando los bullidos de incesantes pensares,
viajando impaciente entre esas rutas quebradizas,
allá lejos de la vida, allá lejos la muerte.
En el medio, como si fuéramos dos aguas que separadas
se juntan en el medio del mar.
Ahogo sin respiro,
unas bocas que se enciman por lo bajo,
y se tocan,
se rozan,
y en ese momento el viaje termina,
y yo contra tu pecho te lloro,
te murmuro.
Y es perfecto ese encuentro con uno.

De noche



Por las orillas de mi cadera hasta el leve gesto de sonrisa. Nace poco a poco un aliento fresco de decires.
Estas al lado, estas conmigo. Se cubre todo en un verano abrupto, desafiante. Insolentes vamos, nos violentamos con mensajes que nos sacuden de nuestros días, avanzamos hasta la sombra que espera al final del sol, nos despedimos lentamente.
Entonces como carnaval se disfruta de los amantes, de los ojos escondidos y las palabras prohibidas.

viernes, 30 de enero de 2009

Celebración VI




Esta carne que late, estos huesos que gritan.
Mi vientre que no es mío, mi espíritu viviente que destroza tantos sensibles.
El cuerpo, el látigo, la cumbre.
Mi cabeza que gira, mis piernas que vuelan, mis dedos que expresan.
La conciencia, el placer, la duda.
El llanto que despliega, la vida que nace, todo el amor que invade.
La espera, fluir, abrirse.
Enseñar,
luz,
fin,
parir.

La felipe


Las histéricas somos lo máximo!
Extraviadas, voyeristas, seductoras, compulsivas
finas divas arrojadas al diván de Freud y de Lacan.
Ay! Segismundo, cuánta vanidad!
infantiloide y malsano el orgasmo clitoriano?
Ay! Segismundo, cuánta vaginalidad,
el orgasmo clitoriano se te escapa de la mano.
Ay! Segismundo de tan macho ya no encaja
no me digas que el placer es pura paja.
Por lo demás correspondo a tus teorías
estoy llena de manías, sueños, fobias y obsesiones,
sólo tu envidia del pene y el diván de tus eunucos
administra mis pulsiones compulsivas.
Cómo me duele este mundo, Segismundo
la parálisis, la envidia, la neurosis nos gobierna
como me duelen los pobres, como jode la miseria,
ora si que lo de menos es la histeria.
Ay! Segismundo, ...
Las histéricas somos lo máximo!
Solidarias, fabulosas, planetarias, amorosas
super egos moderados, cunnilinguos para todas a placer...
Ay! Segismundo, cuánta vanidad!
Ay! Segismundo, cuánta vaginalidad,
Ay! Segismundo de tan macho ya no se
si poner punto final, o ponerle punto G.

lunes, 12 de enero de 2009

Insensatas

Yo me pregunto dos por tres, que hay de los días domingos universalmente nostálgicos y de los gatos temerosos a la gente.
Me pregunto también, de la gente temerosa de otra gente, de uno miedoso con uno mismo. Me pregunto por el sol cuando deja el día, y de la noche allá arriba sola y descalza. De los besos sin destino, de las sombras contra la hierba, de la hierba pegada a mis pies.
Me pregunto de cosas que jamás pensare. Me pregunto además de la gente haciendo el amor, y de la gente peleando por algo olvidado. Pregunto por la memoria y por el momento. Me pregunto por la vida y todo sobre sus vagamundos.
No será digo yo, todas estas preguntas una respuesta a ninguna pregunta.

Corto


Vamos letargos al manto de árboles que cubren la noche. Nos preparamos para el festejo, para recibir al nacimiento.
Vamos silenciosos a presenciar la partida y una muerte.
Vamos despacito,
vamos a la vida.

martes, 6 de enero de 2009

Miedos


Simplemente la perdición de retomar siempre un recuerdo que me haga volver a vivir cosas de puro joder, de puro sufrir.
Problemas en la cabeza que deseamos tener.
Culpa engendrada por pena y la infinita deuda que nunca pagaremos.
Soltarnos de un amor y creer que nunca encontraremos un refugio. Creer y pensar.
Sostener una visión por temor a vernos. Ver y decir.
Reírnos de todo y abrazarnos al universo, hacer el amor con la plenitud,
Si en fin de eso se trata el amor y el goce.
Amar a la vida.

sábado, 3 de enero de 2009

El Universo VI


El era un buda de estos tiempos. Sobre las flores recitaba unos versos tranquilos, mientras la naturaleza gigantesca sobre el lo cubría del frío.
Se le veían apenas los ojos y su mente perdida en otros mundos visitaba ágil al sufrimiento y a la percepción del ser.
Sobre su meditación yacía un manto violeta que antes no había estado ahí, pero que sin embargo debía estar allí en ese tiempo, en ese lugar. ÈL se paró, liviano como una pluma, fuerte como un árbol; al costado de la sombra se paro y miro y observo. El manto de un espesor hermoso, comenzó a levitar, y bailando y gimiendo una canción muy lenta le dijo a buda: "ahora soy yo un compañero para tus viajes, tus pies para andar, tu boca para plegar, tus ojos para espiar."
Sin entender demasiado pero sin importar de esto otro poco, buda hizo caso y tomo el manto se cubrió de el y ya no solo y de soledades emprendió su camino.
El manto se le metía en la piel, y de apoco no había dos cuerpos, de pronto creció el día y el sol. Se abundo de árboles y plagas, de animales y de otros cuerpos.
Del cielo unas fuertes manos abrazaron al buda, y comenzó a llover.
Lejano, como si viniera de un infinito una voz hablo y procuro: " Mírenme, de esta lluvia nacen las cosas cotidianas y este mundo que viene de otros mundos que hay en èl, y que ahora son ser y sentires. Ahora podemos decir para contar, porque ahora somos existencia y existimos."
Vida.