martes, 2 de diciembre de 2008

Pasajera

Nuestro amor no es un momento, ni un instante .Nuestro amor siempre fue una espera...larga y ardua, calma y pasiva. Nos amábamos sin conocer esa palabra, esa cosa minúscula de sentirse único, de vernos únicos. Éramos invisibles a los demás, no nos veíamos, ni nos veían, siempre esperábamos .No nos conocíamos, ni nos habíamos visto pero esperábamos. Con desesperación, o en plenitud de saber que al final íbamos a tocarnos y a besarnos quizás. Recuerdo que sin pensar en eso, ese día me miraba frente a un espejo y recorría poco a poco, me buscaba, me encontraba. Mamá se había dado cuenta de mi estado, estaba entre ansiosa y vivaz, pero mis movimientos eran letargos y siempre soñaba. Me acuerdo que soñaba con vos y luego de eso a la mañana siguiente mi cabeza se llenaba de recovecos en forma de preguntas, casi todas sin respuestas porque era inútil, yo no sabia de vos, ni vos de mí. El sueño se repetía, siempre el mismo; un ombú, la sombra dormida, un banco pintado con confesiones y vos parado mirando el cielo, buscando el dios que nos espía; luego siempre igual, yo caminando, con un libro desmenuzado y el pelo que se me volaba con el viento, que era suave y la brisa murmuraba un tanguito pegadizo. Después de eso despertaba y mis días continuaban como cualquier otro.
Fue la última vez que soñé y desperté amando y con ganas de ser amada. Quería conocerte, abrazarte y contarte mis ganas y mis ensueños. Nunca pasó claro, eras un pasaje, un dibujo vivaz que duraba poco. Este día relatado, fue el día que me perdí en una plaza que nunca había visto, no me acuerdo de donde venía pero me detuve a repasar una poesía sin vida, era lindo el lugar, lleno de recuerdos y tuve la impresión de ya haber estado, me resultaba conocido y sabía incluso el camino. EL corazón se aceleraba cuando me acercaba a un ombú que dormía en su sombra, luego cerca un banco pintado y reposando sobre él confesiones. Allí me detuve con ilusiones apaciguadas, allí te esperé, sabía que vendrías buscando al dios, y también para enamorarnos, porque no hacia falta conocerte, ya nos habíamos visto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me encantó
te qierito

juli